lunes, 26 de octubre de 2009

26.10.08 - El Concierto

Amanece de nuevo un 26 de octubre... pero ya es un año después...

A estas horas hace un año, me encontraba igual, en la pc, aunque subiendo las fotos de lo que había sido uno de los días más importantes de mi vida... cuando te conocí Andi C...

Pero la idea esta vez es revivir ese tan esperado concierto... así que ha retroceder en el tiempo...

Despierto en la mañana del domingo 26 de octubre de 2008, había llegado el día!!! Quede con un amigo para encontrarnos a medio día en el Jockey Plaza, para ir luego al Monumental. Me alisto y me pongo el polo de “Socia de la Soledad” (que se saco para el concierto). Me llega un mensaje al cel diciéndome que lo de la reunión de ayer con Andrés había salido en Correo. Corro, literalmente, a comprarlo!! Y siii ahí estaba la foto, que emoción!! Y que tarde que se me hacia!! Me llamo mi amigo diciendo que andaba dando vueltas en el taxi esperando que llegara. Agarre mis cosas, el banner y guarde con mucho cuidado las entradas en mi bolsillo, y digo las entradas porque tenía en mis manos las 3 primeras entradas emitidas en VIP. Tome un taxi y me fui. Subí al taxi donde él estaba y partimos hacia el monumental...

Era un día soleado y llegábamos a la explanada para hacer la cola. Ahí estaban Fabio y Rosana, asiduos asistentes a las reus K-lamares o mas bien infaltables, ellos estaban en la cola desde las 9 am, y muy amablemente nos permitieron acompañarlos en la espera :).

Las horas pasaban y mientras escuchábamos lo que era la prueba de sonido, mis fantasmas volvían... uno de mis momentos más esperados se conjugaba con otro nada agradable. Quienes me acompañaron saben de que hablo, y como dice Andrés “Olvidar es divino y fuerte la fuerza del destino”.

Eran las 5 de la tarde y las puertas de la explanada se abrían para lo que sería un Gran Concierto. Entramos y corrimos. Recuerdo haber visto el modulo que vendía las camisetas, pero me era más importante llegar y estar adelante. Logramos la privilegiada ubicación de estar pegados a la reja que separa el escenario. Era el escenario y yo... Seriamos Andrés y yo!!! Y... a seguir esperando, otras 4 horas que siempre son interminables.

En el escenario veíamos puesto en el atril, a ese ya característico K-lamar, y a los plomos que el día anterior habíamos conocido. El día soleado se empezaba a tornar gris. La noche llego y con ella ese escalofrió que recorre mi cuerpo cada vez que se acerca el momento de que empiece un concierto, donde la ansiedad me supera y los nervios también. ¿Acaso un concierto puede generar eso? Cuando es lo que más esperas y sabes que la música que escucharas será sublime, Sí.
El concierto estaba programado para las 8:30, pero recién a las 9 pm, las luces se apagan. Empieza la penumbra de antesala. La pantalla central se enciende y deja ver parte del Set List. El intro y la moneda de dos pesos que gira y gira y la pantalla es invadida por el anuncio que dice: ”GIRA CALAMARO LATINOAMERICA 2008”. Llego el momento!!!! Empiezan a salir los músicos al escenario. Sale Andrés. Se ordenan en el frente Geny Avello, Diego García, Andrés, Candy Caramelo, Julián Kanevsky y atrás Tito Dávila en los teclados y José “El Niño” Bruno en la batería. Estaba en primera fila entre Andrés y Diego. Suenan los primeros acordes de El Salmón con ese quinteto de cuerdas insuperable... “Quiero arreglar todo lo que hice mal, todo lo que escondí hasta de mí, debo contar lo que yo solo sé, uh perdón, Victor Sueiro también. Quiero arreglar todo lo que hice mal, todo lo que escondí hasta de mí, debo contar lo que solo yo sé, uh perdón, INCA KOLA también!!”. Inca Kola!!! Andrés dijo Inca Kola!!! Y solo con eso ya había desatado la euforia de un público que lo esperaba desde hace más de diez años, de un público que lo habíamos esperado toda una vida... Las canciones siguieron y cante con toda la voz que tenía cada uno de los temas. Llego Mi Gin Tonic y aumentaba mi felicidad y es que “también hay un deseo que pido siempre que pasa un tren”... Estaba metida en lo que Andrés llamo “La Convención Nacional de Fotografía Digital” y sí, tenía la cámara en mano, pero eso no evito que cantara todo y saltara todo lo que se podía saltar. Era imposible quedarme estática. Vino la presentación de la banda con Andrés interpretando un tema de Spinetta y también presentando al músico y su amigo Micky Gonzales.

Quisiera enumerar los temas que canto ese día, pero no tengo a la mano el set list. Recuerdo que Calamaro se adelanto en “La espuma de las orillas” y que mientras cantaba “Flaca”, agradeció a los asistentes y dijo algo que a nosotros los K-lamares nos llena de gusto y de orgullo. Dijo: “Gracias por el Cajón”. Era el regalo que como Comunidad le hicimos y el que lo haya recordado, el que lo haya agradecido, aun me emociona.

Pasaban las 2 horas y los acordes de “Paloma” empezaron a sonar… Sí!!! Paloma!!! Cuantas veces vimos el “Made in Argentina” y nos imaginamos dentro de ese concierto... No estábamos en el Obras pero teníamos a Calamaro cantando para nosotros. Los regalos le llueven... y entre ellos algo que parece ser uno de los llaveros de la Comunidad (sigo preguntándome ¿quien fue el que se lo lanzo?). La banda se para adelante, se abrazan, Candy hace un gesto con las manos a manera de cámara fotográfica y Geny arroja al público una de sus uñas de guitarra. El concierto había llegado a su fin.

¿Y cuán importante se vuelve la palabra en la camiseta de Andrés? Ese CHOSEN… Él era el ELEGIDO... envuelto en una badera Peruana y Argentina...


¿Qué más puedo decir?

Si “Paloma” lo dice todo...

“VOY A VIVIR PARA REPETIR OTRA VEZ ESTE MOMENTO!!!”


sábado, 24 de octubre de 2009

Recibimiento a Andrés Calamaro - Octubre 2008

Hace un año...

Ese fin de semana, fue más que eso, fue más que una noche como el Pepsi Music… fue más que solo los tres últimos días de una semana, fueron meses, y también fueron años…

Mi fin de semana se inicia ese pasado 12 de Julio, cuando compre mi entrada para este tan esperado concierto, cuando empecé a restar los días en el calendario, y a ser llamada “Nº 1“ por algunos de mis contactos… Eran más de tres largos meses, y lo único que pensé en estos días, fue que el tiempo se paso volando!!! entre reunas de aniversario y de confraternidad, entre el ir planeando que hacer para recibirlo, entre tanta espera y tanta ansiedad, y entre los ya 100 k-lamares que fueron apareciendo en mi msn...

El 18 intentábamos ponernos de acuerdo, definir el recibimiento y los obsequios, pero nos ganaron las ganas de disfrutar el momento. Salimos del Club de La Unión con pocos acuerdos, con un bus ya ofrecido, pero eso sí, con muchos amigos, y aun más fotos. El Miércoles y el jueves estaban destinados a comprar los regalos, (nunca pensé que una “quijada de burro” fuera tan fea!!! ). Por suerte que nos decidimos por el cajón, el ponchito y la camiseta.

... es viernes 24, a horas de que Andresito llegue a Lima... el bus ya está confirmado pero faltan cosas por hacer. Comprar el regalo para el Capo k-lamar, porque es su cumpleaños, y me parece raro que no haya dicho que Calamaro llegaba ese día solo para saludarlo, jejeje; preparar el libro de visitas, y por supuesto, comprar mi regalo personal para Andrés... Se me hace tarde y salgo en el taxi rumbo a Católica.

Llevo en mis manos o lo intento al menos, los regalos, el banner, y las letras impresas de la canción diez años después, porque sería genial cantarla, pero la canción es muy larga, así que el plaje podrá ayudarnos :)

En el transcurso mi celu suena, y suena, son k-lamares que me llaman y me preguntan lo del bus y la hora, y me dicen que están en camino, que por favor los esperen, yo les respondo a todos, aunque de algunos no reconocía su voz, asumo que eso pasa cuando das tu número telefónico sin pedir el de la otra persona :S

Estando en Católica, encuentro un bus algo antigüito, por no decir otra cosa, pero eso sí, una fila muy ordenada de pasajeros dispuestos a subirse a lo que yo llamaba TOUR AEROPUERTO – HOTEL CALAMARO. El Bus se lleno, y no había espacio para más, la ansiedad crecía, y cuando nos paro la policía, la desesperación también. Hasta yo pensé en bajarme y tomarme un taxi para poder llegar, pero sí que todo estuvo divertido, y hasta el policía se volvió parte de la anécdota y de las recurrentes bromas cada vez que pasábamos al lado de un patrullero. Intentábamos cantar, y digo intentábamos, porque la verdad lo hacíamos fatal, si no fuera porque le poníamos ganas… como se nota que no la hacemos ni en karaoke!!! Pasábamos de fragmento de canción a otro fragmento, pero… si nos ponen la canción, bien que la cantamos completita :D

Llegamos al aeropuerto y todos corremos a “llegada de vuelos internacionales”, ya había gente ahí, varios k-lamares conocidos. Voy a chequear la hora de llegada de los vuelos, y me doy con la sorpresa que el vuelo de Andrés ya había aterrizado, se había adelantado unos 20 minutos!!! Hemos llegado a las justas (maldito policía). Ubicamos el banner de la comunidad para que Calamaro lo vea, y de pronto, se le ve, y bueno, yo que a las justas lo veo… Andrés ya estaba en Lima, y lo teníamos frente nuestro, con esa chalina rosa, y ese sombrero, que días después siguió usando (acaso le debí regalar una chalina¿?), salió, saludo y se subió a su Van. Y nosotros¿? Pues a correr al bus!!!!! Donde está el chofer¿? Donde diablos se metió¿? Quien sabe manejar un bus¿? Nos vamos en taxi¿? Ahí está el chofer!!!!! Era imposible alcanzar la van de Andrés, pero algo haremos en el hotel… Pero eso sí, otra vez empecemos a desentonar las canciones de Andrés, que por suerte que no nos escucha, porque saldría espantado :P.

Estamos en San Isidro, y oh sorpresa la calle del Swissotel está siendo remodelada, mmm, otra vez el dichoso programa APEC¿? Caminemos!! Mismos trabajadores de construcción civil, como por ahí dijeron. Nos paramos en la puerta del hotel. No había gente. No había ruido. Así que empezamos a hacerlo: “Si diez años después te vuelvo a encontrar en algún lugar, no te olvides que soy, distinto de aquel, pero casi igual...” y paso... ese hombre al que tantos años veníamos esperando se asomo por la ventana de su suit, de esa 712, y arrojo rosas, y más rosas, de las que yo solo conseguí un triste tallo, (pero como me dijeron , el tallo vale más porque de ahí agarro Andrés la flor para arrojarla, jajaja). Para mí esa fue la parte más emocionante de ese día, y de ese video también. Le gritamos de todo a Andrés, y los chicos un poco más. Éd grito, con no se qué voz, que teníamos un regalo para él, el cajón, que despertó en Calamaro la única frase que se le escucho esa noche: “bueno, mañana lo tocamos”. Siguieron los gritos y las fotos mutuas, fotos que yo esperaba ver en su blog, pero no sé, se las habrá guardado solo para él. La noche avanzaba y los huéspedes por lo visto se quejaban, tanto así que la policía vino a sacarnos, pero por suerte, antes del odiado desalojo, salió Olga, manager de Andrelo, nos recibió los obsequios, pasando por las fotos de rigor...

Esa noche había llegado a su fin, dejando a unas “Victoria y Soledad” como parte de las historias...